«Me inicie en la cocina gracias a mi padre, ya que el me motivo muchísimo. Antes de empezar a estudiar tenia que probar si de verdad me iba a gustar. Además tenia un tío que trabaja en un restaurante así que aproveche de aprender con el. Recuerdo mi primer día de trabajo en un restaurante con tan solo 17 años.  Fue algo increíble y eso que tan solo lavaba platos…. pero ese día descubrí que este era mi camino. Lo gracioso fue que mi padre me estaba esperando fuera del restaurante como 2 horas, por si salía corriendo del miedo. Así empezó mi camino, trabaje en cebicherias limeñas por casi 4 años hasta que llegue a España y aquí tuve la oportunidad de trabajar ASTRID Y GASTON y posteriormente fui jefe de cocina en el desaparecido TANTA BARCELONA.»

Pablo Ortega